La vivienda se distribuye en dos niveles. En la planta baja nos recibe una amplia estancia que se divide en diferentes ambientes: un acogedor recibidor, sala de TV, un elegante salón blanco y un baño con doble lavamanos y ducha. El gran comedor conecta con una espaciosa cocina office totalmente equipada, que a su vez dispone de sala de máquinas y salida directa al exterior. En esta planta destacan los techos abovedados y de vigas de madera con travesaños, junto a los suelos de terracota, que transmiten el carácter cálido y tradicional de las casas el Empordà.
Desde la entrada, a mano derecha, unas auténticas escaleras de piedra conducen al primer piso, donde encontramos tres generosas habitaciones dobles. La principal sorprende por su amplitud y por la gran sala anexa con armarios empotrados, separada por una elegante arcada que aporta singularidad y encanto. En esta planta también hay un baño completo con ducha. La luz natural inunda los espacios gracias a los solatubes estratégicamente ubicados en el baño y la habitación interior. En esta planta destacamos los suelos de parqué y los techos de vigas de madera, que aportan calidez y confort.
Se trata de una vivienda que respira auténtico estilo rústico empordan